La tumba de las luciérnagas: El otro lado de la segunda guerra mundial en una película clásica de anime
El largometraje fue producido por el estudio Ghibli
Las historias, películas y series ambientadas en la Segunda Guerra Mundial han sido de interés desde hace décadas. En los últimos días, la nueva película Oppenheimer trajo de vuelta un hecho que marcó para siempre a la humanidad: la creación de la bomba atómica. Sin embargo, en este evento existen dos versiones, la estadounidense y la japonesa.
La tumba de las luciérnagas (Grave of the Fireflies), es un largometraje dirigido por Isao Takahata, y producido por Studio Ghibli que se estrenó en Japón en 1988, poco más de dos décadas después de la destrucción de Hiroshima y Nagasaki.
'La tumba de las luciérnagas'
— Generación GHIBLI (@gen_ghibli) October 25, 2022
(Isao Takahata, 1988) pic.twitter.com/wrIFKNiwH3
La historia no se centra específicamente en estas grandes dos ciudades, pero resulta relevante ya que carga con la memoria colectiva histórica de los habitantes de japón, quienes perdieron todo. La trama toma como inspiración la historia de vida del escritor Akiyuki Nosaka, quien vivió en carne propia el bombardeo de su pueblo natal, Kobe cuando sólo era un niño. Su desgarradora experiencia da origen a Seita, el adolescente protagonista del film animado que intenta salvar a su hermana menor, Setsuko, durante este periodo.
La orfandad de Seita y Setsuko es sólo una consecuencia más de un Japón en caída hacia el final de la Segunda Guerra Mundial. Siendo ellos casi los únicos sobrevivientes de su familia, ya que su padre murió como un soldado de guerra y su madre falleció a causa de las incurables lesiones derivadas de un bombardeo aéreo.
Encuentran hogar en un refugio antibombas completamente abandonado y hacen de este un idílico lugar donde juegan a ser felices mientras se bañan con la luz de las luciérnagas. La alegría dura poco, porque Japón está devastado: la pobreza y falta de alimento comienza a cobrar sus propias víctimas. La malnutrición y las enfermedades no cesan, y quiebran el último rezago de esperanza.
Esta película, considerada uno de los títulos más tristes del estudio es la viva imagen de que una animación puede ser igual de cruda y fiel a los hechos históricos.
Otras producciones del estudio, como Porco Rosso (1992) y La colina de las amapolas (2011) también son retratos derivados de las memorias familiares de su director, Hayao Miyazaki, durante el periodo de guerra. Muchos de sus films son considerados antibélicos por criticar duramente el fascismo y resaltar, a través de la fantasía, que sus personajes pueden vivir bajo su propia libertad al romper con las cadenas de un sistema y sociedad injusta.
La película está disponible en Apple TV y Google Play.
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