Los mitos y verdades tras los hackeos en Watch Dogs
Con el reciente lanzamiento de Watch Dogs: Legion y con los otros títulos anteriores surgen varias ciber-interrogantes
El término hacker o pirata informático tiene varias definiciones. Por ejemplo, tal y como ellos se reconocen, "es todo individuo que se dedica a programar de forma entusiasta, o sea un experto entusiasta de cualquier tipo". De acuerdo a la RAE es cualquier "persona experta en el manejo de computadoras, que se ocupa de la seguridad de los sistemas y de desarrollar técnicas de mejora".
La película "Hackers", protagonizada por una joven Angelina Jolie en 1995, los retrata de manera caricaturesca; jóvenes anárquicos, en patineta y alocados, cuya vida nocturna y acceso a una incipiente tecnología computacional ponía en pantalla los más hilarantes escenarios de hackeos, por no decir construcciones poco realistas de cómo era esta actividad en esa época.
Juegos de Guerra, Matrix y Swordfish son otros ejemplos cinematográficos que engalanaron una época dorada, donde ser pirata informático fue el fetiche de varios directores y productoras de películas. Ahora, y a través de los videojuegos, tenemos ejemplos claros de qué puede ser real y no, como por ejemplo en Watch Dogs, Watch Dogs 2 y Watch Dogs: Legion
Estos tres títulos proponen una serie de acontecimiento que, en honor al artículo, la trama pasa a segundo plano porque lo que nos interesa son los mitos y verdades tras los hackeos que se ven en estos juegos.
Gamology, a través de su canal de YouTube, subió un video a mediados de este año en el que invitaron a Samy Kamkar, investigador de seguridad y hacker, para que contrastará su experiencia en sistemas informáticos versus lo que sucede en diferentes escenarios creados para Watch Dogs 2.
Sobre introducirse a los sistemas de vigilancia de las casas solo acercando el teléfono a la caja exterior, Kamkar es claro y señaló que podría ser por medio de un código QR o NFC si es que el sistema es así de fácil de penetrar. Otro detalle es qué tan "hackeable" pueden ser los aparatos en las casas, y apunta a que es posible siempre y cuando estos estén conectados a una red de internet y cumplan otras características que permitan la intrusión.
Para los ataques a los cajeros autómaticos dice que "son al revés" de cómo se muestra en el video, porque "tu vas al cajero y atacas al cajero directamente para obtener el dinero", señaló Samy. Además ya se ha comprobado que una de las formas de vulnerar las cuentas bancarias en cajeros es a través de skimmers, pequeños dispositivos que clonan los datos de la persona para así tener acceso a sus cuentas.
Un artículo publicado en Kaspersky.com, creadores de uno de los sistemas de defensa computacional más conocidos del mundo, tuvo de invitado a Igor Soumenkov, un colaborador de la compañía quien respondió varias interrogantes sobre lo que es más inmediata o a futuro sobre el hackeo que se muestra en el videojuego.
¿Es posible hackear tal y cómo se ve en el juego usando un teléfono móvil? "Por supuesto, en la vida real, los hacks implican mucha más preparación por parte de los delincuentes" respondió el experto, pero también señala que no es tan fácil como se muestra en el título de Ubisoft, porque detrás de esto también debe haber una forma de romper las primeras barreras del sistema para penetrarlo, por medio de un exploit o malware que te de acceso, y eso toma tiempo.
También se pensó que esta saga puede ser un "ejemplo" para hackers que solo busquen causar estragos en la ciudad, como ocurre en el juego; alterar las luces de los semáforos, hacer explotar transformadores etc. Ante esto Igor ve con buenos ojos porque dice "Esperamos que este juego sea una oportunidad para que la gente piense en la seguridad de los futuros sistemas operativos de la ciudad."
Pero, ¿qué tan seguros estamos detrás de nuestros dispositivos?, ¿es factible un ciberataque en un juego en línea? "Tal riesgo existe, y su gravedad depende del tipo de juego que estés jugando y de la forma en que te comportes tanto cuando juegas como en la vida real." Esto se debe a que, hoy en día, las formas de atacar un sistema usando troyanos es bastante más flexible, entregando opciones a los hackers para introducirse a los sistemas y hacer cosas como robar contraseñas, incluso obtener datos de otros dispositivos.
En Watch Dogs, Blume, la mega corporación al interior de este juego tiene el control sobre cTOS; el sistema operativo de la ciudad que maneja desde semáforos hasta el flujo de aguas en las cañerías. Ante esto, el experto, señaló que es poco probable que en la vida real tengamos un conglomerado controlando todos estos aspectos de una ciudad: "No me parece probable. Al menos no concuerda con los intereses de la comunidad empresarial: cada organización quiere tener control sobre su ámbito y no está realmente interesada en los monopolios."
Dicho esto y tomando en consideración los avances informáticos, aun es poco probable que veamos el grueso de lo que vemos a través de los videojuegos de Ubisoft. Implementar la automatización y gestión computacional de una ciudad es un paso gigantesco, implica reformar y cambiar infraestructuras tan básicas (e incluso tan antiguas) como las cañerías y ductos de agua.
De todas formas es importante tener una consciencia en materia de seguridad informática; el manejo de nuestras claves, códigos, tarjetas bancarias, cuentas de correo e incluso redes sociales debe ser proritario. El principio básico es que todo sistema tiene su debilidad y, tarde o temprano, alguien puede encontrarla e introducirse, exponiendo al usuario y poniendo en peligro su privacidad.